Qué ver en Poza de la Sal

Qué ver en Poza de la Sal
Qué ver en Poza de la Sal

¿Quieres descubrir los lugares que hay que ver en Poza de la Sal durante una escapada? Este encantador pueblo ubicado en la provincia de Burgos está impregnado de historia debido a su larga asociación con la extracción de sal. Poza de la Sal: Arquitectura, patrimonio y paisajes naturales. Si deseas visitar la escapada perfecta y experimentar paz y riqueza, esta es. Descubre sus rincones únicos y sumérgete en su belleza. Poza de la Sal, ubicada en la provincia de Burgos, en Castilla y León, es una villa medieval que sorprende por su impresionante patrimonio histórico y su singular paisaje salinero. Famosa por sus antiguas salinas, explotadas desde la época romana, y por ser la cuna de Félix Rodríguez de la Fuente, este pueblo ofrece una combinación única de historia, cultura y naturaleza. Descubre qué ver en Poza de la Sal en una escapada.

Qué ver en Poza de la Sal

  • Castillo de los Rojas: Esta imponente fortaleza, situada en lo alto de un cerro, domina el paisaje de Poza de la Sal. Aunque se encuentra en estado de ruina, su silueta es impresionante y ofrece unas vistas panorámicas espectaculares del pueblo y de los alrededores. Merece la pena subir hasta él.
  • Plaza Vieja: El corazón del casco histórico de Poza de la Sal, rodeado de casas porticadas y edificios emblemáticos como el Ayuntamiento y la antigua cárcel. Es un lugar con mucho encanto, ideal para pasear y disfrutar del ambiente medieval.
  • Plaza Nueva: Aunque más moderna que la Plaza Vieja, esta plaza también tiene su encanto, con la Iglesia de San Cosme y San Damián como telón de fondo. Es un lugar de encuentro para los habitantes del pueblo y un buen punto de partida para explorar el casco histórico.
  • Iglesia de San Cosme y San Damián: Un templo de estilo gótico, con elementos renacentistas, que destaca por su imponente tamaño y su rica decoración interior. Alberga un retablo mayor de gran valor artístico y varias capillas laterales de interés.
  • Casco histórico: Recorrer las calles empedradas del casco histórico de Poza de la Sal es como viajar en el tiempo. Sus casas blasonadas, sus arcos medievales y sus rincones pintorescos invitan a perderse y a descubrir la historia del pueblo.
  • Salinas de Poza de la Sal: Aunque ya no están en funcionamiento, las salinas son el elemento más singular de Poza de la Sal y le dan su nombre. Su paisaje, con las eras y los almacenes de sal, es único y merece una visita.
  • Centro de Interpretación de las Salinas: Ubicado junto a las salinas, este centro ofrece información sobre la historia y la importancia de la explotación salinera en Poza de la Sal. Es un buen punto de partida para comprender la singularidad de este lugar.
  • Casa de Administración de las Salinas Reales: Un edificio histórico que albergaba las oficinas de administración de las salinas. Su arquitectura es un reflejo de la importancia que tuvo la explotación salinera en el pasado, hoy convertida en espacio museístico sobre Félix Rodríguez de la Fuente.
  • Puerta del Conjuradero: Una de las antiguas puertas de acceso a la villa medieval, que se conserva en buen estado. Es un elemento arquitectónico interesante y un testimonio del pasado amurallado de Poza de la Sal.
  • Puerta de la Cadena: Otra de las puertas de la antigua muralla que rodeaba Poza de la Sal, muestra el esplendor de la Villa en el pasado, como sistema defensivo.

Otras cosas de interés en Poza de la Sal

  • Ruta de Félix Rodríguez de la Fuente: Seguir los pasos del famoso naturalista y divulgador, que nació en Poza de la Sal, es una actividad muy recomendable. Hay varios lugares en el pueblo relacionados con su vida y su obra.
  • Mirador del Castillo: Además de visitar el castillo, merece la pena disfrutar de las vistas panorámicas que ofrece este mirador. Se puede contemplar el pueblo, las salinas y el paisaje circundante. Las puestas de sol desde aquí son espectaculares.
  • Senderismo por los alrededores: Poza de la Sal se encuentra en un entorno natural privilegiado, con varias rutas de senderismo que permiten descubrir paisajes de gran belleza. Hay opciones para todos los niveles y gustos.
  • Gastronomía local: Degustar la gastronomía de la zona, con platos tradicionales como el lechazo asado, la morcilla de Burgos y los productos de la huerta, es una experiencia imprescindible. Hay varios restaurantes en el pueblo donde probar las especialidades locales.
  • Fiestas de San Blas y de las salinas: Si la visita coincide con alguna de las fiestas locales, se puede disfrutar del ambiente festivo y de las tradiciones populares. Las fiestas de San Blas, en febrero, y las fiestas de las salinas, son especialmente interesantes.
  • Observación de aves: El entorno natural de Poza de la Sal es un lugar ideal para la observación de aves, especialmente en las zonas húmedas cercanas a las salinas. Hay varias especies que se pueden avistar a lo largo del año.
  • Espacio Medioambiental "El cubo de Poza": Una zona recuperada, de paseo y descanso, desde donde se pueden contemplar magníficas vistas.
  • Visitar el diapiro: Es una estructura geológica singular, formada por la acumulación de sal en el subsuelo, que ha dado lugar al relieve característico de Poza de la Sal y a la presencia de las salinas.

Qué ver en los alrededores de Poza de la Sal

La ubicación de Poza de la Sal, en la comarca de La Bureba, en la provincia de Burgos, permite acceder fácilmente a numerosos lugares de interés histórico, artístico y natural. Si dispones de tiempo, te recomiendo explorar algunos de los tesoros que se encuentran a poca distancia. La riqueza patrimonial y paisajística de esta zona de Castilla y León es sorprendente. A continuación, te presento algunas sugerencias para completar tu visita:

  • Oña (15 km): Esta villa medieval, declarada Conjunto Histórico-Artístico, destaca por el Monasterio de San Salvador, uno de los más importantes de Castilla y León. El monasterio alberga los panteones reales de los condes y reyes de Castilla y Navarra, y su iglesia y claustro son de una gran belleza. Otros cosas que ver en Oña son su casco histórico con encanto, con calles empedradas, casas blasonadas y plazas pintorescas. Pasear por sus calles es como viajar en el tiempo. Además, el entorno natural de Oña, con el desfiladero del río Oca, ofrece paisajes espectaculares.
  • Frías (24 km): Esta ciudad, la más pequeña de España, es un conjunto histórico-artístico de gran belleza, con un impresionante castillo medieval que domina el paisaje. Otros monumentos que ver en Frías son su puente medieval sobre el río Ebro, sus casas colgadas y su judería la convierten en un lugar único. El Castillo de los Velasco, situado en lo alto de un peñasco, ofrece unas vistas panorámicas espectaculares del valle del Ebro. Pasear por las estrechas calles de Frías, descubrir sus rincones pintorescos y disfrutar de su ambiente medieval es una experiencia inolvidable. Además, el entorno natural de Frías, con el Parque Natural de los Montes Obarenes-San Zadornil, es ideal para practicar senderismo y otras actividades al aire libre.
  • Briviesca (21 km): La capital de La Bureba es una ciudad con un importante patrimonio histórico y artístico. Entre los muchos lugares que ver en Briviesca, la Plaza Mayor, porticada y con edificios emblemáticos como el Ayuntamiento y el Palacio de los Soto Guzmán, la Colegiata de Santa María, de estilo gótico, y el Santuario de Santa Casilda, situado en un bello paraje natural. Briviesca cuenta también con un convento con un claustro de gran belleza, el de Santa Clara. Pasear por su casco histórico, descubrir sus iglesias y palacios, y disfrutar de su ambiente tranquilo es una actividad muy recomendable.
  • Monasterio de Rodilla (19 km): Este pequeño pueblo, situado en un bello entorno natural, alberga los restos de un antiguo monasterio románico, que fue un importante centro religioso en la Edad Media. Aunque el monasterio se encuentra en estado de ruina, su iglesia, dedicada a Nuestra Señora del Valle, conserva elementos arquitectónicos de gran interés, como su portada románica y sus capiteles esculpidos. El entorno natural del monasterio, con bosques y colinas, invita al paseo y a la tranquilidad. Es un lugar cargado de historia y de espiritualidad, ideal para los amantes del arte románico y de la naturaleza.

Cómo llegar a Poza de la Sal

Poza de la Sal se encuentra a unos 40 kilómetros al norte de Burgos. Por carretera, se accede desde la N-1, tomando la salida en Briviesca y siguiendo por la BU-V-5028. También se puede llegar desde la AP-1, tomando la salida de Pancorbo/Briviesca. En transporte público, hay autobuses que conectan Poza de la Sal con Burgos y Briviesca, aunque la frecuencia puede ser reducida. No hay estación de tren en Poza de la Sal.

Dónde dormir en Poza de la Sal

  • Hotel Rural El Alma de Poza: Un pequeño hotel con encanto, situado en el casco histórico, con habitaciones decoradas con un estilo rústico y acogedor.
  • Casa Rural La Parada: Una casa rural en un entorno natural con todas las comodidades, con una decoración rústica.
  • Hotel Restaurante El Vencedor (Oña, 15 km): Aunque no está en Poza, este hotel cercano ofrece habitaciones cómodas y un buen restaurante.
  • Hotel Condestable (Frías, 24 km): Ubicado en Frías, en un lugar privilegiado con vistas y con una decoración muy cuidada.

Poza de la Sal es un destino que sorprende por su riqueza histórica, su singular paisaje salinero y su ambiente tranquilo. Es un lugar perfecto para una escapada de fin de semana, para descubrir un rincón menos conocido de la provincia de Burgos y para disfrutar de la historia, la cultura y la naturaleza. Un lugar donde nació y se crió el naturalista Félix Rodríguez de la Fuente, el cuál, siempre hablaba orgulloso de su pueblo natal. Ahora que ya sabes lo que hay que ver en Poza de la Sal, planifica tu escapada con nuestro buscador de alojamientos.