¡Hola, exploradores! Hoy os quiero llevar de viaje a un lugar que me sorprendió gratamente en el corazón de Burgos: Briviesca, la capital de la comarca de La Bureba. A menudo pasada por alto en las rutas turísticas más trilladas, Briviesca es una ciudad con un poso histórico increíble, un ambiente animado y un patrimonio que bien merece una parada. Su trazado casi perfecto de calles que se cortan en ángulo recto ya te indica que no es un lugar cualquiera. Descubre las cosas que ver en Briviesca en un fin de semana.
Qué ver en Briviesca
Cuando puse un pie en Briviesca, enseguida noté que estaba en un sitio con solera. Su declaración como Conjunto Histórico-Artístico no es casualidad. Hay mucho que ver y sentir en sus calles y plazas. Aquí os cuento mis imprescindibles, esos rincones que me dejaron huella y que creo que vosotros también disfrutaréis un montón.
- Plaza Mayor - Es el corazón de Briviesca, ¡y qué corazón! Amplia, porticada en parte y siempre concurrida. Me encantó sentarme en una de sus terrazas a ver la vida pasar. Alberga edificios importantes y es el escenario perfecto para sentir el pulso de la ciudad.
- Colegiata de Santa María la Mayor - Este templo del siglo XIV-XV, aunque reformado, impresiona por su robustez y su retablo mayor, que es una auténtica joya renacentista atribuida a Juan de Ancheta. Su historia y su arte bien merecen una visita pausada para admirar cada detalle.
- Iglesia de San Martín - Otra parada obligatoria. Esta iglesia gótica, también con un retablo espectacular y una portada muy trabajada, complementa la visita a la Colegiata. Me pareció un remanso de paz en medio del bullicio de la ciudad, con una atmósfera muy especial.
- Convento de Santa Clara - Fundado en el siglo XVI, este convento de clausura es imponente. Aunque no siempre es fácil visitar su interior, su iglesia barroca y la fachada exterior ya merecen la pena. Alberga obras de arte interesantes y una historia ligada a la nobleza local.
- Casas Blasonadas (Palacio de los Torre y Casa de los Salamanca) - Paseando por Briviesca, alcé la vista y ¡zas! Me topé con estas casonas señoriales. Sus escudos nobiliarios en piedra y su arquitectura te hablan de la importancia que tuvo la ciudad. Son el reflejo de un pasado hidalgo fascinante.
- Conjunto Histórico-Artístico - Más allá de monumentos concretos, lo que me fascinó fue el conjunto. Perderse por sus calles de trazado regular, descubriendo plazas escondidas, soportales y detalles arquitectónicos en cada esquina es una delicia. ¡La mejor forma de conocer Briviesca es caminarla!
- Hospital de Nuestra Señora del Rosario - Este antiguo hospital de peregrinos, hoy centro cultural, es otro edificio notable. Su fachada plateresca es preciosa y nos recuerda la importancia de Briviesca en las rutas históricas. Un testimonio de la hospitalidad de antaño.
- Excolegiata de San Martín (actual Casa de Cultura) - No confundir con la iglesia parroquial. Este edificio histórico, que fue colegiata, ahora alberga la Casa de Cultura. Su estructura y su historia añaden otra capa al rico patrimonio de Briviesca. Siempre interesante ver cómo se reutilizan estos espacios.

Actividades que realizar en Briviesca
Briviesca no es solo para ver monumentos, ¡también es para vivirla! Me di cuenta de que, además de su patrimonio, ofrece experiencias muy auténticas. Si queréis sumergiros un poco más en el espíritu burebano, aquí os dejo algunas ideas que puse en práctica y que me encantaron.
- Degustar las almendras garrapiñadas - ¡Esto es un pecado delicioso! Briviesca es famosa por sus almendras garrapiñadas artesanales. Entré en varias pastelerías y confiterías para probarlas y llevarme un buen cargamento. ¡No os vayáis sin hacerlo, es el souvenir perfecto!
- Tapeo por el centro - Como buena ciudad castellana, Briviesca tiene una cultura de tapeo muy arraigada. Exploré los bares de la Plaza Mayor y calles aledañas, probando pinchos variados acompañados de un vino de la tierra. ¡Una forma genial de socializar y comer bien!
- Senderismo por la comarca de La Bureba - Si os gusta la naturaleza, aprovechad que estáis en La Bureba. Hay rutas señalizadas que parten o pasan cerca de Briviesca, ofreciendo paisajes de campos, pequeños bosques y colinas. ¡Perfecto para desconectar y estirar las piernas!
- Fotografía urbana y de detalle - Para los aficionados a la fotografía como yo, Briviesca es un filón. Sus calles rectas, los soportales, las fachadas blasonadas, los detalles de las iglesias... Cada rincón ofrece una composición interesante para capturar la esencia de la ciudad.
- Visitar el mercado semanal - Si vuestra visita coincide con el día de mercado (tradicionalmente los martes), daos una vuelta. Es una oportunidad estupenda para ver productos locales, artesanía y sentir el ambiente más auténtico y comercial de la comarca. ¡Me encantan los mercados!
- Asistir a las fiestas locales - Briviesca celebra sus fiestas patronales en agosto y otras festividades durante el año. Si tenéis la suerte de coincidir, podréis disfrutar de verbenas, actos tradicionales y un ambiente muy animado. Apúntate estas fechas: 9 de mayo, Romería de Santa Casilda, Fiesta de la Rogativa de la Tabera, una de las fiestas principales de Briviesca (se celebra el martes anterior al Domingo de la Ascensión, una de las fiestas principales de Briviesca), Fiestas patronales de Nuestra Señora de la Asunción y San Roque, cuyos días principales son el 15 y 16 de agosto.
- Relajarse en sus parques y paseos - La ciudad también cuenta con zonas verdes agradables como el Parque de la Florida o los paseos junto al río Oca. Son lugares perfectos para descansar un rato, leer o simplemente disfrutar de un momento de calma.
Qué ver en los alrededores de Briviesca
¡Pero la aventura no acaba en Briviesca! Una de las cosas que más me gustó de alojarme aquí fue usarla como campamento base para explorar la comarca de La Bureba y sus alrededores. Hay un montón de lugares interesantes a tiro de piedra, perfectos para excursiones de medio día o día completo. Coged el coche, que os esperan paisajes y pueblos con mucha historia y encanto.
Destinos cerca de Briviesca
✓ Santuario de Santa Casilda (aprox. 12 km)
Este lugar me pareció mágico. Es un santuario excavado en la roca, colgado sobre unas hoces espectaculares y junto a unos pequeños lagos (Pozos Blanco y Negro) a los que se atribuyen propiedades curativas según la leyenda. El entorno natural es precioso y las vistas son impresionantes. ¡Una visita muy recomendable y diferente!
✓ Monasterio de San Salvador de Oña (aprox. 24 km)
Oña es una villa histórica dominada por su impresionante Monasterio de San Salvador. Visitar su iglesia, el claustro gótico y, sobre todo, el Panteón Real y Condal donde descansan reyes y condes de Castilla y Navarra, fue como hacer un viaje en el tiempo. La visita es muy completa e interesante.
✓ Poza de la Sal (aprox. 26 km)
Este pueblo tiene una personalidad única. Famoso por sus salinas romanas, que aún se pueden visitar, y por ser el lugar de nacimiento de Félix Rodríguez de la Fuente. Tienes que ver en Poza de la Sal las salinas, sus empinadas calles medievales por las que disfrutar paseando y dejarte llevar por la historia salinera que impregna todo el lugar.
✓ Monasterio de Rodilla (aprox. 17 km)
Si os gustan las ruinas con encanto, acercaos a Monasterio de Rodilla. Aquí encontraréis los restos de una antigua iglesia románica y de un castillo medieval en lo alto de un cerro. Aunque está en ruinas, el lugar tiene un aire melancólico y las vistas de La Bureba desde allí son fantásticas.
✓ Pancorbo (aprox. 25 km)
Justo en el límite de los 30 km, el Desfiladero de Pancorbo ofrece un paisaje natural espectacular, con impresionantes formaciones rocosas. Además de las vistas y la posibilidad de hacer senderismo, el pueblo de Pancorbo tiene restos de fortalezas y un aire de lugar estratégico y fronterizo muy interesante.
✓ Burgos (aprox. 45 km)
Estando en Briviesca, acercarse a Burgos es casi una obligación y ¡está muy a mano! La capital burgalesa os espera con su imponente Catedral, que es una auténtica joya gótica. Pero no os quedéis ahí, tenéis muchos otros lugares que ver en Burgos: recorred el animado Paseo del Espolón, visitad el fascinante Museo de la Evolución Humana y perdeos por las calles del casco antiguo tapeando la famosa morcilla.
Cómo llegar a Briviesca
Llegar a Briviesca es bastante fácil, la verdad. Si venís en coche, que para mí es lo ideal para luego moverse por La Bureba, la ciudad está perfectamente comunicada. Se encuentra junto a la Autopista AP-1 y la carretera N-I, que unen Burgos con el País Vasco. Así que, tanto si vienes del norte como del sur, el acceso es directo y cómodo.
Para los que preferís el transporte público, ¡buenas noticias! Briviesca cuenta con estación de tren. Aunque no paran todos los trenes de alta velocidad, sí hay servicios de Media Distancia que la conectan con ciudades como Burgos, Miranda de Ebro, Vitoria o incluso Madrid. Además, también hay una estación de autobuses con conexiones regulares a Burgos y otras localidades de la provincia y comunidades vecinas. Consultad horarios en RENFE o las compañías de bus correspondientes.
Dónde dormir en Briviesca
Cuando busqué alojamiento en Briviesca, me alegró ver que hay varias opciones dentro de la propia ciudad, lo cual es muy cómodo para explorarla a pie. Desde hoteles más funcionales a opciones con más encanto, aquí os dejo 5 alternativas que encontré en Booking.com y que me parecieron interesantes:
- Hotel Restaurante El Vallés - Un clásico en pleno centro de Briviesca. Súper cómodo para patear la ciudad y conocido por su restaurante. Funcional y con todo lo necesario. (En Briviesca).
- Hotel Isabel - Otra opción céntrica en Briviesca, perfecto si buscas una ubicación estratégica. Ofrece habitaciones sencillas y un trato familiar para sentirte como en casa. (En Briviesca).
- Hotel El Palacete del Obispo - Alojarse en un palacete restaurado siempre tiene su encanto. Este hotel boutique ofrece una experiencia especial con historia y diseño cuidado. (En Quintanilla San García, aprox. a 19 km).
- Hotel Boutique Valle de Oca - Un refugio de tranquilidad en el Valle de Oca. Ideal si buscas desconectar en un entorno rural con estilo y atención al detalle. (En Villanasur Río de Oca, aprox. a 23 km).
- Hotel Rural Rio Molinar - Para los amantes de la naturaleza, este hotel rural ofrece paz y rutas de senderismo cercanas. Un lugar acogedor para disfrutar del campo burgalés. (En Piedrahita de Juarros, aprox. a 36 km).
- Hotel Rural La Aldea Encantada - Con un nombre así, ¡promete! Este alojamiento rural te sumerge en un ambiente tranquilo y pintoresco, perfecto para escapar del bullicio. (En Quintanilla del Monte en Rioja, aprox. a 43 km).
¿Ya te has decidido?
La verdad es que Briviesca me pareció un destino muy completo. Tiene ese equilibrio perfecto entre patrimonio histórico, ambiente de ciudad pequeña y un entorno natural, La Bureba, lleno de posibilidades. Es ideal tanto para una escapada cultural como para usarla de base y explorar pueblos con encanto como Oña o Poza de la Sal, o parajes sorprendentes como Santa Casilda. Además, ¡esas almendras garrapiñadas son un vicio! Espero que mi relato te haya picado la curiosidad. Ahora que ya sabes lo que hay que ver en Briviesca planifica tu escapada con nuestro buscador de alojamientos.